Servicio al cliente de Orange 1414 y 902012220
Desde hace dos días un spammer está enviando millones de mails con el remite de una de mis cuentas de correo. No sé si utiliza sólo el remite o también el smtp. De esa inmensa cantidad de envíos un porcentaje es enviado a direcciones saturadas, abandonadas o inexistentes, así que los mensajes rebotan y se informa al supuesto remitente que no han podido ser entregados. O sea, a mí. Lo que quiere decir que cada hora recibo unos 5000 mensajes de este tipo. El problema no es sólo es el coñazo de bajar tantos avisos, es que además es casi imposible encontrar entre tanta paja los mensajes importantes. No sigo comprobando la dirección desde mi programa de correo pop para evitar la descarga de tanta basura y decido intentar comprobar la cuenta desde el webmail. Siguen llegando mensajes a porrillo a mayor velocidad que la que yo puedo borrarlos.
Llamo al “servicio al cliente” de Orange, mi proveedor, a ver si me pueden decir si están usando mi smtp o no. En el caso de que lo estuvieran usando, digo yo que bastaría con no permitirlo. Incluso ni a mí mismo, si no saben hacerlo mejor. Así yo podría seguir recibiendo mensajes en esa dirección y usaría otro smtp de otra cuenta para enviarlos. De hecho, es lo que estoy haciendo desde hace meses porque las nuevas medidas de “seguridad” que aplicaron en sus smtps no me permiten con mi programa de correo y sistema operativo hacerlo.
Me cuesta 45 minutos que un pobre tipo sin puta idea de nada me coja el teléfono. Doy mis datos docenas de veces y no le suena ni el propio dominio que pertenece a su compañía (tengo que deletrearle “ctv”). Por supuesto, no entiende nada de lo que le estoy contando, pero hace como que sí. Me deja en espera cinco minutos con el “Let the sunshine” en versión francesa. Está sorprendido de la cantidad de mails que tengo en el buzón de entrada: más de 9000. No entiende nada. Se lo vuelvo a explicar. Me vuelve a dejar con el bucle de la cancioncita de "Hair". Vuelve con una idea cojonuda: que me ponga un filtro antispam. Le intento explicar que no se trata de que reciba mucho spam sino que toda esa avalancha son mensajes devueltos porque alguien sí que lo está enviando con mi remite. Vuelta a esperar. La letra de la canción -lo juro- desgrana unos versos que dicen “armonía y comprensión, empatía y confianza abundan”. Vuelve. Que me baje un antitroyano y que lo instale. Le vuelvo a intentar explicar que no tengo ningún troyano. Vuelta a esperar. Vuelve. Dice que borre mi cuenta y que me haga una nueva. Le explico que si la borro perderé todos los mensajes que recibo en ella. Dice que lo entiende. Vuelta a esperar. Vuelve. No sé qué estupidez dice ahora. Vuelta a esperar y vuelta con otra gilipollez. Le pregunto si cada vez que me deja esperando va a preguntar a alguien que sepa más. El pobre diablo confiesa que sí. Le pido que me pase con alguna persona que sepa más. Dice que no puede ser, que ellos no saben qué hacer, que no tiene la culpa de que yo reciba tantos mensajes. Empiezo a desistir de intentar hacerle entender algo. Se pone nerviosísimo. En la conversación me ha llamado sesentaidós veces “Sr. Entrialgo” como una especie de muletilla talismán que le libre de poder dar algún dato coherente. Le pregunto que si sabe lo que es un smtp. Me dice que no me puede dar esa información. Me pregunta que si tengo alguna duda más. No, claro, no me queda ya ninguna duda de la puta mierda del servicio al cliente que tiene esta compañía. He desperdiciado hora y media entre las esperas y este diálogo de besugos. Apunto en la agenda cambiarme de proveedor de internet y telefonía en cuanto tenga un rato. Escribo esto mientras el "Let the sunshine" me sigue martilleando el cerebro.
13 comentarios:
...hijos de puta...
los pobres diablos de los call centers son como escudos humanos para las compañías de mierda que llevan el asunto de reventa de comunicaciones (la mayoría de telefónica y tiembla si tienen red propia). yo los expropiaba a todos y hacía las comunicaciones estatales... a tomar por culo!
Con razón fueron incapaces de configurarme bien la IP fija cuando no les salió bien a la primera... Y eso que les envié por fax los datos técnicos que apuntaban al lugar inequívoco donde estaba el problema.
Ni que decir tiene que me cambié.
Saludos. Lola.
El gag definitivo es que el teléfono de atención es de pago, al menos en Ono, que son los que me torturaron a mí. Llama para comprobar si es así, y para exigir que no te pasen al cobro esa llamada, que eso no te llevará más de... eh... veinte minutos.
Yo no entiendo cómo las empresas de telefonía se pegan año tras año en una guerra de precios y ofertas por captar cuota de mercado. El día que a algún "lumbreras" se le ocurra poner a la suya un servicio al cliente ejemplar será el día en que convertirá a esa empresa en líder indiscutible del mercado.
Yo conozco personalmente a peña que trabaja en atención al cliente en Orange. Saben de informática (y ya no digamos de Redes) lo que yo de máquinas de coser.
Les hacen un curso express y ála, a dar la cara. Les tienen prohibidas ciertas palabras. Por ejemplo, no puden hablar de "problema", sino de "incidencia". Como con Franco, que no habían "chabolas", sino "casitas de autoconstrucción".
El 1414 no es de pago. Pero antes me tuvieron esperando con distintas chorradas en el 902 de pago entre una cosa y otra unos 40 minutos sin exagerar.
El servicio de att al cliente de orange está en chile, por eso de abaratar gastos.
De hecho, ni si quiera es de orange, es de una tercera empresa que se encarga de los servicios, por eso es tan mierdoso.
A mi hermano, le han tenido 2 meses con el servicio colgado, le han venido 3 técnicos diferentes a instalar-rinstalar-configurar-reconfigurar el router... El pobre ya no sabe si pegarse el tiro él o disparar al 'orangero' de turno
Me voy de Orange. Dos días torturado por "Let the sunshine" y una llamada de 45 minutos con un teleoperador que se suponía de segundo nivel y que ni escuchaba, ni hacía el mínimo esfuerzo por pensar (quizás porque no tenía los conocimientos necesarios). Que curioso a mi siempre me llaman "Don Pablo" (que me suena a mafioso), no te llamaron "Don Mauro" y así sonaba a monologuista.
Por cierto: 900 901 300, es el teléfono para llamar gratuitamente a Orange (no me puedo creer que haya que llamar a un 902 y pagar). Aunque a veces falla y hay que volver a llamar.
las mierdas de la vida, que yo trabajo ahí donde estan los pobres infelices que te atienden el telefono cuando llamas a atención al cliente.
pobres tipos nosotros.
Yo trabajé en un call center para Orange y por suerte o por desgracia, no como soporte técnico, sino vendiendo X producto a Empresas (muchas veces móviles personales de autónomos) desde las 09.00 de la mañana... Y claro.
Se cagaban en tus muertos:
a. por llamarles a esas horas.
b. porque lo que les ofrecías era una mierda.
c. porque muchas veces ya les había llamado otro compañero ofreciéndoles lo mismo y por desgracia la mierda de sistema seguia dejando que llamaras a la gente que rechazaba.
Unos pringados es lo que eramos :D
¿Y el que te atendió a ti? Ten por seguro que estaba en una sala enorme, levantando la mano mientras hablaba contigo, poniéndote la musiquita (y cagándose en todo) cuando conseguia que, a quien le tocara, viniera a decirle algo, y retomando la llamada igual de perdido que antes porque el otro tampooc tiene ni puta idea. Un horror.
Desde entonces cada vez que oigo en algún sitio una centralita se me ponen los pelos de punta, jajaja.
Sorry por la mala experiencia!
Nikaperucita: La verdad es que soy de fácil contentar. Hace un año volví a llamar por un problema con el router e increiblemente me atendió una chica muy amable, que sabía de lo que hablaba y me lo solucionó. Después de eso, además, me enteré de que la fundación Orange ha pagado el documental de "María y yo". Con esos dos detallitos ya me caen mejor y he aceptado una oferta que me han hecho que me obliga a otro año de permanencia.
me voy de orange por el atraco del 902 indignante, llevaba 10 años con ya.com me migran a orange y empiza la fiesta cortes y mas cortes llamadas y mas llamadas para solucionarlo y nada.
hasta nunca cutres y ladrones
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